Cada mujer sabe cuando está preparada para ser madre, las mujeres somos muy sabias en lo que se refiere a nuestro cuerpo, siempre se ha dicho que las mujeres tenemos un sexto sentido, pues es cierto, sabemos cosas sin que  nos las digan, deducimos, investigamos, sabemos dónde meternos y cuando salir de un sitio, estoamos preparadas para la vida, por esto también sabemos cuándo ser madres. Esto es algo que surge, que llaga de momento, que te pilla por sorpresa, puedes pensar que no quieres tener hijos, pasándote media vida utilizando métodos anticonceptivos, incluso en alguna ocasión haber tenido que utilizar ellaone.es porque sabía que no era el momento adecuado.

Pero de pronto algo cambia, algo en nuestro interior se transforma, algo que viene detonado por cualquier cosa que ha pasado en nuestro entorno, un bebe que has visto por la calle, un escaparate lleno de ropa de bebé que te ha cautivado, te has enterado del embarazo e una amigo o simplemente una mañana te levantas pensando en ser madre.
es entonces cuando te pones a ello, es entonces cuando decides darle la vuelta a tu vida, es entonces cuando piensas que ha llegado el momento de sentar la cabeza, no te lo piensas más y vas a por ello, de lleno, sin pensar en que pasará después, ya se irá viendo como surgen las cosas, ya se irá viendo cómo evoluciona la vida, lo importante en este momento es que quieres ser madre y nada ni nadie te va a convencer de lo contrario.

A esto se le llama instinto maternal, a muchas mujeres se les despierta después de los veinticinco, en los últimos años se ha demostrado que la edad a la que se despierta este instinto ahora es después de los treinta, quizás por los problemas económicos por los que pasamos a esas edades, quizás porque con esta década de crisis nos lo pensamos un poco más y somos más conscientes de que el trabajo puede fallar, la estabilidad puede fallar y no estamos muy seguras de poder hacerlo bien. Por cualquiera de estos motivos somos madres mas tarde y de menos hijos, antes se tenían cuatro, ahora uno y por poder decir que se es padre. Las familias numerosas ya no están de moda, ahora tres son multitud, la vida nos ha enseñado a vivir con poco y repartirlo entre los que estamos es más fácil si no somos muchos.